Clavo Grano

La forma clásica y más segura de usar el clavo entero es para infusionar lentamente su aroma, sin que se pierda en la preparación. La técnica más famosa es el clou oignon o "cebolla claveteada":

1. Pela una cebolla pequeña.
2. Pincha 2 o 3 clavos directamente en la cebolla.
3. Añade la cebolla entera a tu caldo, estofado o guiso durante la cocción.
4. Retira la cebolla con los clavos antes de servir.
   Este método garantiza que todo el perfume del clavo pase al plato de forma controlada y sin riesgo de que alguien se encuentre un clavo al comer.

¡Sí, y el aroma que conseguirás será espectacular e incomparable! Al ser muy duros, hay dos métodos ideales:

• Mortero: Es el método tradicional y muy efectivo. Te permite controlar perfectamente la textura y el proceso de machacado libera los aceites esenciales de forma increíble.
• Molinillo de especias (eléctrico): Si necesitas más cantidad, usa un molinillo potente (preferiblemente uno dedicado a especias para no mezclar sabores). Muele siempre en pulsaciones cortas. El polvo resultante será exponencialmente más potente que cualquier clavo en grano .

El clavo entero es extremadamente potente, y su sabor se infunde con gran intensidad en los líquidos calientes. La regla de oro es la máxima precaución: para una olla de tamaño mediano (2-3 litros), con 2 o 3 clavos enteros suele ser más que suficiente para aromatizar todo el plato. Un solo clavo de más puede desequilibrar y dominar el resto de sabores. Recuerda que siempre es más fácil añadir que quitar.

Un clavo de olor de calidad superior tiene tres sellos inconfundibles que puedes comprobar tú mismo:

1. Debe estar entero: Fíjate en que conserve su "cabeza" (el botón floral) y su tallo. Un exceso de clavos rotos o sin cabeza es señal de menor calidad.
2. Debe tener aceite: Presiona suavemente la cabeza del clavo con la uña. Si está fresco y es de calidad, debe soltar una minúscula y brillante gota de su aceite esencial. ¡Esa es la prueba de su potencia!
3. Debe flotar en vertical: Un truco de experto. Pon un clavo en un vaso de agua. Si se hunde o flota completamente horizontal, está viejo y seco. Si flota en vertical, con la cabeza hacia arriba, significa que está lleno de aceite y en perfectas condiciones.

Sorprendentemente, el clavo de olor es el botón floral seco y sin abrir del árbol del clavero (Syzygium aromaticum). Son, literalmente, las flores del árbol en capullo, que se recolectan a mano justo antes de que se abran. Posteriormente se dejan secar al sol, y es en ese proceso cuando adquieren su característico color marrón oscuro y concentran su increíble y potente aroma.